Hay cabellos que no se dejan domar con facilidad.
Rizos rebeldes, texturas impredecibles, curvas que piden a gritos ser entendidas. Durante años, muchas clientas llegaban a nuestro salón con una sensación compartida: “Nadie entiende mi melena rizada”.
Y no nos conformamos con escucharlo… queríamos cambiarlo.
Por eso, en Eva Pellejero decidimos ir un paso más allá: formarnos con…
